En las mañanas cuando me despierto, corro las cortinas de mi habitación y encuentro el azul del cielo opaco, el árbol un poco más grande y la pared del vivo naranja de hace unos años. Y sin embargo, hoy como hace 16 días esperaba que la mañana fuera más azul, mi árbol más verde y la pared menos naranja.
Aunque pensándolo bien, estaría bien solo lo primero.
Aunque pensándolo bien, estaría bien solo lo primero.
Créditos: A la Bogotá de 25º.
P.D. Y hoy martes me despertó un mensaje de texto que me pedía que mirara por mi ventana: el cielo azul.
6 comentarios:
Conchita del Mar envió esto muy acorde:
El viento ya no sopla
La boca bien cerrada
Amárrate los pies
Piensa en tu madre
Y déjate caer
Mira al Cielo ceder
Y a la Tierra después
Vuelve a creer
La sangre es amarilla
Déjate caer
Las olas ya no mojan
La ira de las rocas
Amárrame otra vez
Un beso a mi madre
Y déjame caer
Instrumental
Mira el Cielo ceder
Y a la Tierra después
Vuelvo a creer
La sangre es amarilla
Déjate caer
Consuélame otra vez
Porque no pienso volver
El suelo tiene sed
La vida es imprecisa
déjate caer
Las horas no demoran
A mi alma desertora
Explícalo muy bien
Se abre la tierra
El cielo está a mis pies
¡¡¡Qué liiindo!!!!
puedes pintar de azul etéreo tu ventana... así, siempre que mires por ella el cielo se verá azul...
son elementos externos que nos ayudan a autoengañarnos...
A mi alma desertora explícalo muy bien...
Para_lelo:
Booa... -_-
Anabella:
De vez en cuando es mejor cantarnos verdades. Pero sé que volverá el azul que quiero.
¿Y cuál es el azul que quieres?
Para-lelo:
Azul, azul, azul casi violeta.
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