26 de noviembre de 2007

Evolución


Los biólogos, los antropólogos y hasta los sicólogos hablan constantemente de la evolución del hombre. Del paso de primates ó póngidos a homo sapiens, o sea, hombres pensantes y caminantes de dos patas, a lo que me parece ridículo pensar que eso es evolución, porque es más fácil caerse en dos que en cuatro y lo digo yo que tengo temporadas de andar en el piso (obvien los chistes emocionales y existencialistas, por favor).

En el proceso perdimos pelo y ganamos en herramientas, pasamos de ser comestibles a comernos al resto y aparentemente a tener cerebros más grandes que no implica, por supuesto, mejor desempeño en el ICFES. Claro que si algo es reconocido en el hombre y que aún tenemos en común con algunas otras especies de primates es el fabuloso PULGAR OPONIBLE, “ya que mediante esta función anatómica, el pulgar puede manipular objetos grandes apoyándose con la palma de la mano y objetos medianos o pequeños apoyándose con uno o más dedos de los otros dedos”, toda una grandeza.

Pero en estos momentos en lo que las fiestas navideñas se aproximan y mi Abue quiere enmarcar las ventanas en luces ó mi Madre poner un moño en la puerta, he reafirmado un par de eventos evolutivos olvidados en el tiempo. Me refiero a la QUIJADA PRENSIL y a la maravilla del DIENTE CORTANTE. La primera fue idea de Quino pero nadie le puso atención y la segunda va detrás del dedo pero a todos se nos olvida. ¿Qué sería de nosotros los ayudantes, cocheches de madres y abuelas, si no desarrolláramos esas dos habilidades?

Por lo pronto, jamás podríamos sostener más luces de las que tenemos en las manos ó alrededor del cuello y ¡jamás!!, lograríamos en medio de botas navideñas, campanas, bolitas y velas, cortar la cinta pegante de la pereza que nos da ir a buscar las tijeras en no sé donde.
Y digan lo contrario, a ver…

Créditos: A mi socio preferido
Datos: Wikipedia

9 comentarios:

Para-Lelo dijo...

Síp... Estoy absolutamente de acuerdo...

VICA dijo...

Correpto y exzappto!!!

Mistress_blue dijo...

Jajajajaajaja.... Pues vaya que tienes razon al decir que esas otras dos características evolutivas existían.

Pi dijo...

me encantó... y no has visto mi pulgar no-opuesto del dedo gordo del pie, levantando alguna guirnalada navideña caída... evoluvión o habilidad, no sé?...

abrazo pre-navideño

VICA dijo...

!Somos lo mássimo!!
Yo puedo caminar y masticar chicle al tiempo...

Para-Lelo dijo...

Te quedó muy bonito el nuevo diseño... Besos!!!

Dr. Aberrado dijo...

y saquemos a la luz el reflejo inmediato de nuestras extremidades cuando una bolita, angelito de cristal obuñuelo se nos resbala de las manos, que no deja que se rompa, o ensucie en el suelo, pero que si se destroce contra la paré.
Pa' que carajos sirve, ni puerca idea, pero consecuencia de la evolución si debe ser.

Anónimo dijo...

eeexcelente!!!
me hacía falta leerla

VICA dijo...

Para-lelo!! y yo que pienso que no se combinar colores!!

Que se resbale tambi´en es evolución, el lado prensil de desvia.

Y qui´en es anónimo?