9 de enero de 2008

Mío

"El erotismo explora el cuerpo como un continente desconocido. Allí donde el relámpago inicial de la atracción se trueca en el reposado deleite con quien alguien se descubre a sí mismo en la dicha del impudor consentido. El animal que existe en nosotros y al cual la mente enciende y exalta en un teatro de juegos y máscaras. De fantasías y representaciones. Con la sola voz y un oído receptivo es factible incendiar el mundo.
Rayo que desnuda o pozo hondo y oscuro donde la delicia se viste de secretas luces. De sabores indefinibles. Caen los títulos, las vanas jerarquías. Sólo imperan los sentidos. Como en el Carnaval, el Rey es Súbdito, la Reina Puta. Es entonces cuando arriba la poesía y busca lo imposible. Que el buzo ahogado en la marejada de la carne halle su palabra y diga su verbo húmedo. Respire liberado de la atónita mudez del milagro y formule esa consabida letanía. En todas partes, en todos los siglos, el ritual milenario. Fuego de la seducción. Nieve del hastío. En todas las lenguas, la tensión del cazador en pos de su presa. O la pasividad que dúctil encadena. Cuando la boca exultante sólo atina a decir: Mío."
JUAN GUSTAVO COBO BORDA
Creditos: Al yopo
Fotografía: Pirelli